El mercado mundial de la cadena de frío está valorado actualmente en el mundo a 182.500 millones de dólares y se espera que crezca a una tasa de crecimiento anual del 13,5 % para 2027.
En esta industria el cuidado es fundamental ya que por mucho que se sigan medidas estrictas en toda la cadena de suministro, aún surgen algunos problemas que conducen a una cadena de frío rota. Por dar solo un ejemplo, la industria biofarmacéutica pierde aproximadamente $35 mil millones anuales debido a fallas en la logística de temperatura controlada.
El ecosistema de la cadena de frío es complejo y trae consigo una serie de desafíos, pero en este momento, la industria enfrenta escasez de capacidad refrigerada.
Una sola etapa que rompa la cadena de frío significa que los productos comenzarán a perder calidad en cuestión de minutos, lo que se torna peligroso para los consumidores finales.
En FRIOSAN sabemos esto y somo una solución confiable dentro de la industria del país. Tanto es así que nos vimos en la obligación de aumentar nuestra capacidad por la enorme demanda que hay de nuestros servicios.
En todo el mundo las empresas de la cadena de frío están recurriendo a la automatización y los robots para superar las complejidades a las que se enfrentan. Los robots de última generación están equipados con inteligencia artificial, sensores y datos que agilizan las operaciones y funciones laborales para manejar tareas complicadas.
Las duras temperaturas en un entorno de cadena de frío significan que los trabajadores necesitan equipo de protección adecuado y descansos regulares, con limitaciones en la cantidad de horas que pueden pasar en condiciones de frío. Los climas fríos y peligrosos pueden provocar accidentes en el lugar de trabajo y riesgos para la salud cuando se trabaja a temperaturas bajo cero durante un período prolongado.
Los robots y los sistemas de inteligencia artificial están abordando los desafíos que enfrentan al maximizar los almacenes de la cadena de frío con sistemas de recuperación, almacenamiento automatizado y abordar la escasez de productos.
La aplicación de robots y automatización de manera estratégica puede ayudar a las cadenas de frío a satisfacer la creciente demanda de productos frescos y en buen estado.